(para Pilar Flamma)
Una pequeña salvaje
Con su paso zigzagueante
Va recorriendo el paisaje.
Tiene un tatuaje en el alma
Que cambia con cada luna,
Y se disfraza de calma
Si un ronroneo la acuna.
Ojazos de chocolate
Escudriñan con recelo,
Lista para el combate
Antes de tocar el suelo.
Mi niña dibuja sombras
Y las pinta con colores
Y vuela de alba en alba,
Ligera como las flores.
Si pudiera abrazarla
Con un ala protectora,
Me desplumaría el miedo
A que ella se sienta sola.